Durante este jueves, el último día de la Convención Nacional Demócrata, Kamala Harris se convirtió en la candidata demócrata por la presidencia de Estados Unidos, aceptando formalmente la nominación de Biden y demás colegas.

Será entonces que Harris se enfrentará a Trump por la carrera presidencial, ofreciendo un discurso en el que se destacaron ideas como el derecho al aborto la seguridad en la frontera con México y la regulación en el tema de la migración, manteniendo firmeza en asuntos internacionales.

"En nombre del pueblo, de cada estadounidense, sin importar el partido, la raza, el género, o el lenguaje que su abuela hable, aceptó su nominación. Seré la presidenta que nos una en nuestras mayores aspiraciones" prometió Harris, quien podría hacer historia al convertirse en la primera presidenta de Estados Unidos.

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Hija de padres migrantes, madre de la India y padre de Jamaica, la funcionaria nació en Oakland, California, siendo la primera persona de origen de Asia-Pacífico en competir por la presidencia de Estados Unidos a sus 59 años.

Recordemos que su camino hacia la presidencia inició con la renuncia por la reelección de Joe Biden, quien aprovechó para ofrecerle su apoyo como su sucesora en las próximas elecciones, asegurando su capacidad para llevar a Estados Unidos a la gloria.

Si bien, la candidata demócrata comenzó con una tensa situación electoral, con las elecciones casi perdidas, afortunadamente logró revivir el voto demócrata al punto de empatar con su contraparte republicana, Donald Trump, dejando a 3 ciudades como las principales a obtener el voto: Michigan, Wisconsin y Pensilvania, esta última conocida por conservar políticas conservadoras.

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