El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, generó titulares este domingo 22 de diciembre de 2024, al anunciar que declarará a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas. Según sus palabras, esta medida será implementada tan pronto como asuma el poder nuevamente el próximo 20 de enero de 2025.

Trump promete mano dura contra cárteles y pandillas

Durante un foro organizado por Turning Point USA en Phoenix, Arizona, Trump reafirmó su compromiso con una política de mano dura, prometiendo que todos los miembros de pandillas extranjeras serán expulsados y que las redes criminales en Estados Unidos serán desmanteladas.

En su discurso, acusó a otros países, incluyendo a México, de enviar narcotraficantes a territorio estadounidense. Además, destacó la existencia de una banda de origen venezolano operando en Colorado como ejemplo de los retos que enfrenta su administración. Ante esta problemática, sugirió que para combatir eficazmente a los cárteles sería necesario contemplar una intervención militar en territorio mexicano, una propuesta que sin duda generará controversia.

Trump y su conversación con Claudia Sheinbaum

En un momento del discurso, Trump reveló que ya tuvo contacto con la nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum, describiéndola como "una mujer encantadora y maravillosa". Sin embargo, dejó claro su postura firme frente al problema del narcotráfico.

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"Hablé con la nueva presidenta, la presidenta Sheinbaum, una mujer encantadora. Le dije: 'No pueden hacerle esto a nuestro país'", afirmó Trump.

Es importante mencionar que, desde la administración pasada, México ha considerado cualquier tipo de intervención militar estadounidense como una línea roja. La postura del gobierno mexicano, encabezado por Sheinbaum, se mantiene en que la crisis de las drogas en Estados Unidos debe abordarse como un problema de salud pública y no solo desde la frontera.

Aunque Trump no ofreció más detalles sobre sus planes específicos, su discurso ha avivado el debate sobre la relación entre México y Estados Unidos, particularmente en temas de seguridad y narcotráfico. Con su regreso a la Casa Blanca a menos de un mes, queda por ver cuántas de estas promesas se traducirán en acciones concretas y cuáles permanecerán como parte de su retórica política.