Leonardo Dicaprio es de padre italiano y madre alemana, nacido en Hollywood, California. Fue llamado Leonardo justamente por el célebre pintor italiano, Leonardo DaVinci. Durante un viaje a Italia, su madre sintió por primera vez las patadas de su bebé mientras miraba un cuadro de Da Vinci en el Museo de los Uffizi de Florencia, lo que la llevó a ponerle su nombre.
Los primeros roles de Leonardo Dicaprio son roles de poca participación en televisión, como en “Los problemas crecen”, en 1991. Sin embargo, su pasión va más dirigida hacia el cine, y es en 1993 cuando tiene sus dos papeles que empezaran a moldear su carrera actoral a corta edad. Primero tiene el rol en el drama “This Boy 's Life”, y comparte pantalla con el ya mítico Robert De Niro, en donde De Niro es el padrastro maltratador de DiCaprio. Pero es en ¿A quién ama Gilbert Grape? Esta película de la mano de su protagonista Johnny Depp, retrata a donde sorprende al público con su interpretación de un joven con retraso mental. Con tan solo 19 años cuando tuvo el desafío de debutar en el cine con esta actuación, DiCaprio recibió sus primeras nominaciones a Mejor actor de reparto en los Globos de Oro y los premios de La Academia.
El icono de la década de los 90
Luego de estos dos papeles, Dicaprio tuvo diversos roles en géneros como western con Rápido y Mortal, y en el biopic The Basketball Diaries, donde retrata la etapa de adicción a las drogas del músico Jim Carroll. A partir de 1996, es cuando genera una base de fanáticos por roles románticos de éxito internacional. Romeo+Julieta (1996), dirigida por Baz Luhrmann. La película toma la clásica tragedia de Shakespeare y la traslada a un contexto contemporáneo, con la ciudad de Verona transformada en un lugar de violencia y conflicto moderno. DiCaprio, como el joven Romeo, aportó una energía frenética y emocional que, junto con su carisma, cautivó a una audiencia joven, ganándose un lugar en el corazón de los adolescentes y jóvenes adultos de la época. La adaptación, a pesar de ser muy estilística y exagerada, aprovechó la pasión y la juventud de DiCaprio, quien se mostró natural y magnético en el papel.
Si este éxito no era suficiente para empezar a realzar el nombre de Leonardo Dicaprio, en 1997 se estrena Titanic. Es de los papeles más populares dentro de su filmografía. Con Titanic, DiCaprio alcanzó el estatus de fenómeno global. Su interpretación de Jack Dawson, un joven artista que se enamora de una joven aristócrata a bordo del fatídico transatlántico, lo catapultó a la fama mundial. La película fue un éxito monumental, ganando la cinta 11 premios Óscar y convirtiéndose en una de las películas más taquilleras de la historia del cine. Aquí, DiCaprio no solo demostró su carisma y capacidad para protagonizar una historia romántica, sino que también se erigió como el rostro de una nueva ola de estrellas de Hollywood: modernas, sensibles, vulnerables y desbordantes de energía juvenil.
En ese momento, DiCaprio no solo era un actor joven en ascenso, sino un verdadero ícono cultural. Su imagen, especialmente en los años posteriores a Titanic, se construyó a través de su papel como un joven adulto que no temía tomar roles desafiantes, desde villanos a personajes inquietantes en situaciones extremas, y que, a pesar de su fama y atractivo, se mantenía distante de las convenciones sociales de las estrellas de cine tradicionales.
Una dupla legendaria en el cine: Martin Scorsese y Leonardo Dicaprio
Dicaprio ha trabajo con los directores más consagrados del cine, como los ya mencionados Baz Luhrmann, James Cameron, el director britanico Christopher Nolan en Inception(2010), en dos ocasiones con Quentin Tarantino, pero la colaboración entre Martin Scorsese y Leonardo DiCaprio es una de las más fructíferas y longevas en la historia del cine contemporáneo. Desde su primer encuentro en Gangs of New York (2002), ambos se han convertido en una suerte de alma gemela creativa, y su relación ha evolucionado, creando una serie de películas que han dejado una huella profunda en la industria del cine. Esta dupla ha dado lugar a algunas de las obras más aclamadas del siglo XXI, construyendo un cuerpo de trabajo que no sólo redefine ciertos géneros, sino que también explora las complejidades de la condición humana a través de personajes a menudo desbordados por sus pasiones, sus vicios o sus propias ambiciones.
Con The Aviator (2004), el director y el actor comenzaron a consolidar su relación como una asociación artística poderosa. DiCaprio, bajo la dirección de Scorsese, interpretó a Howard Hughes, un genio excéntrico y multimillonario cuya vida estuvo marcada por la grandeza, la obsesión y la locura. La película no solo le otorgó a DiCaprio una nominación al Oscar, sino que también demostró que la relación entre ambos ya no era solo una cuestión de casting, sino una alianza creativa.
The Departed (2006), quizás sea el ejemplo más emblemático de cómo esta colaboración alcanzó su punto álgido. En este thriller criminal, DiCaprio interpretó a Billy Costigan, un policía encubierto en la mafia de Boston, un papel lleno de tensión emocional y moralidad ambigua. The Departed no solo le dio a DiCaprio su primer Globo de Oro como Mejor Actor, sino que además se convirtió en la película que finalmente le otorgó a Scorsese su tan esperado Oscar a Mejor Director, un reconocimiento a una carrera que ya era legendaria.
En 2023, con Killers of the Flower Moon, Scorsese y DiCaprio regresaron a la pantalla con una épica que aborda los crímenes cometidos contra los pueblos nativos de Estados Unidos durante la década de 1920. La película no solo marca una vez más la excelente sintonía entre ambos, sino que también coloca a DiCaprio en un terreno narrativo y moralmente desafiante, uno en el que las cuestiones de avaricia y complicidad histórica se exploran con una profundidad impresionante.
El papel ambientalista que ha tomado a lo largo de los años
En 2015, Leonardo Dicaprio protagonizó El renacido, del director mexicano Alejandro Gonzalez Iñarritu (cinta por la que ambos ganaron estatuillas Oscar). Esta cinta es esencialmente sobre la relación del hombre con la naturaleza. Ya en 2014 DiCaprio se convierte en un Mensajero de la Paz en la esfera prioritaria de cambio climático. Su fama como uno de los mejores actores de su generación la ha utilizado para catapultar mensajes de conciencia sobre el calentamiento global.
Todo esto nace en 1998 cuando conoce al vicepresidente (en su momento) de los Estados Unidos, Al Gore, y conoce de primera mano las condiciones climáticas del planeta. Fundó la organización que lleva su nombre, cuya página detalla los programas en los que participa la LDF (The Leonardo DiCaprio Foundation): fauna y paisajes, vida acuática, alteración climática, medios de comunicación y tecnología, derechos de los pueblos originarios… A lo largo de los últimos veinte años, la organización ha entregado más de 100 millones de dólares en ayudas, financiando más de 200 iniciativas de gran impacto en 50 naciones y en cinco océanos.
En su cumpleaños número 50, recordamos el talento generacional que ha abarcado en los últimos 30 años. Ha dejado una marca profunda en varias generaciones, no solo como actor, sino también como un incansable defensor del medio ambiente. Con papeles memorables que lo han convertido en uno de los grandes de Hollywood, su impacto trasciende la pantalla gracias a su activismo, en el que gracias a su influencia y el cariño que su gran cantidad de fanáticos muestran hacia él, ha transmitido el mensaje sobre la urgencia de proteger el planeta, convirtiéndose en una voz influyente para las nuevas generaciones.
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