Porristas de la Escuela Secundaria Evans, en Lubbock, Texas, sufrieron quemaduras de primer y segundo grado luego de que su entrenadora les ordenara realizar "paseos de oso" y "caminatas de cangrejo" sobre una pista al aire libre extremadamente caliente, como castigo.

El motivo de este "castigo" fue que las trece animadoras, estudiantes de octavo grado, hicieron una ovación en un partido de fútbol que la entrenadora consideró "una falta de respeto". Sin embargo, lo peor vino después, convirtiéndose en una pesadilla para los padres.

Uno de los progenitores relató que las niñas, de entre 11 y 15 años, tuvieron que recorrer una distancia de aproximadamente un kilómetro bajo este castigo, aunque la mayoría no pudo continuar debido al dolor, y algunas incluso se enfermaron. Las jóvenes afirmaron que el castigo tuvo lugar el miércoles por la tarde, alrededor de las 2 p.m. Uno de los padres, que fue a verificar la temperatura de la pista ese mismo día, aseguró que alcanzaba al menos 50 grados centígrados.

"Le dijimos que nos ardían las manos, pero ella respondió que no le importaba y nos obligó a regresar a la pista", comentó de manera anónima una de las animadoras.

Los padres esperan que se presenten cargos criminales contra la entrenadora y confirmaron que la policía ya está llevando a cabo una investigación.

El Distrito Escolar Independiente de Lubbock (Lubbock ISD) también emitió un comunicado público en respuesta al incidente:

Estamos abordando este asunto con la máxima urgencia y estamos plenamente comprometidos a investigar las circunstancias que rodearon el hecho. La maestra involucrada ha sido puesta en licencia administrativa mientras se realiza la investigación

Finalmente, expresaron su profunda preocupación y pesar por el sufrimiento causado a las estudiantes y sus familias, asegurando que se buscará hacer justicia y prevenir que incidentes de esta índole vuelvan a ocurrir.