El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, culpó a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) de no combatir la corrupción de hacer prácticamente nada ante las desigualdades en el mundo.

Haciendo alusión a su visita en Nueva York el mes pasado, el mandatario se jactó de haberles puesto el ejemplo señalando sus fallas con las vacunas, en especial con la campaña de aplicación del biológico Covax que representa un porcentaje del 5% de las personas vacunadas.

También cuestionó que la organización tenga un gran aparato burocrático con alcances limitados a la hora de solucionar problemas en específico, “hay una burocracia dorada en la ONU”, dijo, “medio ambiente, derechos humanos, protección a las mujeres. De todo. Pero ¿y en esencia?”.

Aunque López Obrador compartió una estrategia para combatir la pobreza en la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU, algunos homólogos objetaron que dicha resolución no era viable.

Su plan era que los magnates con fortunas de más de mil millones de dólares distribuyeran el 4% de su riqueza entre los 750 millones de pobres del planeta. En definitiva, algo imposible.

No obstante, para el presidente la pobreza, derivada de una distribución poco equitativa de la riqueza, lleva indirectamente al cambio climático, la corrupción y problemas con los que México y otros países lidian.

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Con información de Actualidad RT