A causa de la pandemia por COVID-19 muchos decidieron resguardarse en sus casas con el fin de evitar contagios; México fue uno de los países que se vio afectado por la rápida propagación del virus, obedeciendo las recomendaciones de la Secretaría de Salud y la iniciativa ‘‘quédate en casa’’, propuesta en abril de 2020.

Como consecuencia de la ‘‘nueva modalidad’’, la clausura momentánea de parques y gimnasios, y ante el temor de contraer el virus, se incrementaron las prácticas sedentarias y disminuyó la realización de actividad física, fomentando los casos de obesidad y sobrepeso, en especial entre los mexicanos.

En el estudio‘‘Actions & interventions for weight loss’’ publicado por la empresa Ipsos en enero de 2021, se demostró que los mexicanos son los que más han subido de peso durante el último año con un promedio de 8.5 kilos por adulto, seguido por Arabia Saudita, Argentina, Perú y Chile.

El reporte contempló a más de 20 mil personas de alrededor de 30 países entre los meses de octubre y noviembre del año anterior; la investigación muestra los métodos que se utilizan para perder peso, siendo los más comunes la alimentación saludable y la realización de ejercicio físico, mientras que la menos frecuente fue la reducción de alcohol.

En el caso de México, se presenta una tendencia por comer más sano sin hacer alguna clase de dieta, siendo el segundo país de los 30 que consideran esta opción.

El 68% de los mexicanos entrevistados indican que reducen el azúcar en su alimentación cuando están intentando bajar de peso.

Otra inclinación entre los procedimientos que utiliza el mexicano para eliminar peso es el evitar comida procesada, siendo el cuarto país de la investigación en aplicarlo.

El 45% de los mexicanos deciden también eliminar las grasas saturadas de su alimentación.

Se le preguntó a los encuestados qué es lo que creen que el gobierno o compañías podrían hacer para ayudar a la sociedad a tener un peso y un estilo de vida saludable, los mexicanos contestaron que la creación de áreas verdes públicas para ejercitarse, las facilidades para realizar actividad física y el acceso a comida más saludable serían muy buenas opciones.

Según cifras de la Revista Médica del Instituto Mexicano del Seguro Social, México ocupa el segundo lugar de prevalencia mundial de obesidad en la población adulta y el cuarto lugar respecto a la población infantil.

La obesidad y el sobrepeso son uno de los problemas más importantes de la salud pública a nivel internacional pues los casos aumentan a gran velocidad y con ello el riesgo de padecer enfermedades crónicas que muchas veces terminan quitándole la vida a quienes las sufren.