Después del violento motín llevado a cabo el día de ayer en el Capitolio de Estados Unidos, donde legisladores se reunían para certificar oficialmente la victoria de Joe Biden en las elecciones estadounidense, llevadas a cabo el pasado noviembre del 2020, el Jefe de Policía, Steven Sund, anunció su inminente renuncia tan solo horas después de que la presidenta de la Cámara Baja de Representantes, Nancy Pelosi, la solicitará.

La abdicación de su cargo se hará oficial a partir del 16 de enero, 4 días antes de que Donald Trump deje su cargo y Biden se convierta en la persona más poderosa del mundo al ser nombrado presidente de los Estados Unidos de América.

Sund informó que lo que él y las demás autoridades policiales esperaban era una protesta pacífica, no el violento amotinamiento que causaron los simpatizantes del aún mandatario de Estados Unidos. Dicho enfrentamiento terminó en 5 personas muertas y 14 más en prisión, además el pronto ex-jefe de policía, recalcó que lo que ocurrió ayer en el Capitolio fue algo que jamás había experimentado durante los 30 años que ha llevado de servicio a la nación.

La actuación de la policía en el terrorífico evento ha sido blanco de críticas, calificándola de insuficiente, vulnerable y un fallo total, pues la seguridad que velaba por la protección de la acrópolis se vio fácilmente reducida por los manifestantes, quienes se paseaban dentro del Capitolio sin preocupación alguna, tomándose fotos en los asientos de los legisladores y ondeando la bandera estadounidense orgullosamente.

Algunas personas todavía no tienen idea de como un evento de tal magnitud, que además había sido previamente convocado por Trump, haya sido capaz de terminar en semejante barbarie e incluso el mismo Biden, se preguntó qué habría pasado si en vez de partidarios de Trump, los asaltantes hubieran sido afroamericanos.

Recientemente Pelosi pidió invocar a la Enmienda 25, misma que anteriormente también había sido solicitada por el congresista Adam Kinzinger. Esta enmienda convierte al vicepresidente del país, en este caso Mike Pence, en presidente de forma temporal o permanente, según sea el caso. Las razones de la aplicación de esta medida política van desde algún impedimento físico o mental, el cual no permite al funcionario la correcta dirección de su cargo, hasta simplemente por que no se le considera apto para continuar con su labor.

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