Durante la semana del 21 al 27 de abril ya tuvieron lugar, en la ciudad de Tijuana, dos foros de participación y asistencia para los candidatos en competencia por la gubernatura de BC, eventos en los cuales se han dado cita algunos de los principales empresarios de la ciudad.

La dedicación, empeño, esfuerzo y trabajo de cada uno de los aspirantes al cargo se destaca por su presencia, personalidad y actitud positiva al expresar las palabras e ideas donde evocan un Estado de mayores privilegios para la sociedad a favor de los niños, jóvenes, estudiantes, transportistas y empresarios.

Los candidatos han estado presentes y se muestran convencidos de su compromiso y lealtad a la sociedad.

Sin embargo, en estos encuentros de ofertas de Gobierno e ideologías de partido, se ha destacado la ausencia del candidato que más promueve la preocupación por el bienestar de las personas. El representante del movimiento el que más trabajaría para mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos.

El candidato por MORENA BC, Jaime Bonilla, ha sido el ausente y según dice, lo seguirá estando. Así, deja en el aire y en mucho qué desear las propuestas que arroja y que arropa, que no son suyas, sino las que el Presidente Andrés Manuel López Obrador le dio a México y a él, el triunfo.

Se aprecia en sus actitudes que Bonilla no esta totalmente convencido o dispuesto a querer ser gobernador. No le importa que las personas conozcan sus propuestas ni le importa dialogar. Un gobernador debe estar presente. Si cómo candidato Bonilla no está...

Quizá alguien ya le ha dicho que será el ganador en las próximas elecciones a pesar de lo que haga o deje de hacer, considerando así que no vale la pena perder el tiempo presentándose con los demás aspirantes.

La inasistencia es señal de indiferencia. Temor quizá. Pero ¿a qué se le puede temer si sólo es una reunión con quienes se compite, con los empresarios cuyas inversiones marcan la pauta económica de la entidad y sobre todo, quines se supone lo ayudarán por ser empresario como ellos?

Lo preocupante es que si una persona, sin ser aún gobernador no se preocupa por asistir a simples reuniones a expresar y exponer sus ideas, ¿tendrá la preocupación de ayudar genuinamente, de trabajar día y noche por personas que son obreros, amas de casa, adultos mayores y estudiantes? ¿Acaso considera que no le ofrecen nada?

La realidad es clara pero muchos no quieren observarla. El hecho de avanzar con una bandera y colores que prometen la 4ta. Transformación, no garantizan esa misma actitud a quien los porta. Un empresario millonario solo vive por y para su dinero, no para la gente.

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