Lucía Argut es actriz y conductora. Está próxima a estrenar la película Cuando Toca Toca, en la que interpreta el papel protagónico. Con ella iniciamos una serie de perfiles de los talentos con mayor potencial de crecimiento en Tijuana y San Diego.
Cuándo la actriz Lucía Argut era una niña le encantaba escuchar a Caló. Todo el día.
El legendario quinteto de raperos encabezado por el DJ y productor discográfico Claudio Yarto sonaba en el reproductor de su recámara mientras ella cantaba a todo pulmón frente al espejo.
Para ello se caracterizaba como una diva sacada de la Edad de Oro de Hollywood, con ayuda de la ropa que tomaba prestada de una tía y que le quedaba arrastrando.
Caló era muy popular en los noventa. Tanto que para Lucía, llegar a conocerlos, dejen ustedes ser como ellos, era una posibilidad poco más lejana que una estrella.
Pero el año pasado Lucía recibió una invitación de Yarto a colaborar.
Esto, que parece un sueño hecho realidad, es una especie de gesto simbólico de todas las cosas que están ocurriendo en su trayectoria profesional.
Lucía ya tiene tres créditos en papeles protagónicos y la experiencia de haber conducido cuatro programas de televisión. El más reciente es Better Questions.
La suerte parece estar tocando a su puerta con insistencia. Esta tijuanense de 31 años recién ha terminado de rodar la película Cuando toca toca, producida para la televisión, y el cortometraje El amor no existe, de Fernando Fisher. El cine es su adicción.
Si su estilo personal puliera describirse con una película famosa, ¿cuál sería?
Tengo un lado obscuro y otro dulce. Sería The Little Princess cuando aflora la “niña imaginativa” en mí. Bram Stoker’s Dracula cuando ando dramática.
De hecho, Gary Oldman, protagonista del clásico de Francis Ford Coppola, es uno de sus modelos actorales a seguir. Otro es Jack Nicholson. The Shining es la primera película que se le vino a la mente cuando le pregunté cuáles eran sus favoritas.
Desde niña, sumergirse en el cine se convirtió en una forma de salvación.
Pasé una infancia de maltratos físicos y emocionales en casa. La música y el cine fueron mi refugio.
Estuvo en clases de canto por 8 años y perteneció al coro de la iglesia a donde sus padres acudían. Se entregué por completo a la música y después a la actuación.
“Al principio era como un juego y un escape”, reveló, “creía que era imposible ir por ese camino al ser adulto, lo veía como una fantasía”.
Hasta que llegó a la adolescencia se dio cuenta que no tenía por qué tolerar los abusos que sufría en casa. Y se independizó.
La actuación fue muy importante en su crecimiento personal.
"Me di cuenta que actuar me permitía transmitir un pensamiento o sentimiento a los demás". Esto, aseguró, fue parte importante de su proceso de maduración.
La actuación también permite transformar la perspectiva que mucha gente tiene sobre sus propias vidas.
Su primer trabajo de actuación fue el cortometraje Tiempos perdidos (2013). Luego condujo un programa de gastronomía, El sabor de la verdad (2013), en la escuela de artes culinarias en donde también estudió.
Luego hizo apareció en videos musicales y transmisiones en vivo como conductora y modelo.
A los 18 años comenzó a trabajar muy duro para salir adelante. Sin embargo, la liberación del rígido ambiente familiar la condujo a una vida de fiesta y excesos.
“Caí, como dicen, en un ‘abismo de vacío y confusión’. Sin darme cuenta, me puse en situaciones que me la hicieron pasar igual de mal a como pasé mi infancia”.
Uno de sus salvavidas fue Don Miguel Ruiz, autor de Los Cuatro Acuerdos. Leerlo la llevó a emprender una búsqueda de transformación.
Hay una que la marcó:
Todas tus circunstancias cambian para bien, en un sentido excepcional.
La experiencia de Lucía es doblemente rica, pues había trabajado en ambos lados de la frontera. Pero la incursión de una mujer latina en la industria del cine y la televisión en Estados Unidos es doblemente difícil, advirtió, pues a la misoginia se suma el racismo.
En Estados Unidos, como persona latina, los retos son mayores, advirtió. "Hay mucha competencia si uno quiere llegar por el lado honorable".
Sobre las acusaciones de abuso reveladas a lo largo de los últimos meses en Hollywood, Lucía lamentó que sea algo que ocurre en todos los ámbitos e industrias.
"Que las personas con poder abusen de las que tienen un sueño y que sea solapado es grotesco”, sentenció.
“Fue importante que saliera a la luz, especialmente para que las actrices con menos experiencia sepan que ese no es el camino exclusivo para lograr tus metas”.
Lucía ha sido víctima de este tipo de acoso, pero no en la industria. Hasta ahora he tenido la dicha de trabajar con gente muy profesional.
“El solo hecho de ser mujer en un país donde el machismo aún no ha sido superado, ya es un reto”, dijo “hay que pelear por la igualdad en salarios y estar a expensas de juicios malintencionados”.
Es por eso que Sor Juana Inés de la Cruz es una mujer que le gustaría interpretar en pantalla”, reconoció.
"Como personaje siento que tiene muchas ‘áreas de oportunidad’ que serían muy complejas de explorar”, dijo, “caray, tuvo que hacerse pasar por hombre para entrar a la universidad".
Para Lucía, los valores más importantes para llegar al éxito en una carrera artística son amor por lo que hace, ser original y trabajar con mucha creatividad, en ese orden de importancia.
“Apenas hace unos años decidí vivir como si fueran los últimos. Y pienso cumplirlo laboralmente.”
Como conductora, Lucía aparece en...
Better Questions 2018 - 2019
Las Mañanitas 2017 - 2018
Cada Mañana 2015
Sabor de la Verdad 2013
Y como actriz, protagoniza...
Cuando Toca Toca 2017
Claroscuro 2017
Tiempos Perdidos 2013
Fotos: René Bueno
Comentarios
Facebook
SanDiegoRed
Nuevos
Mejores