El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, terminó la semana sumando una polémica más a su historial. Recientemente el mandatario ha causado revuelo al solicitar a los gobernadores de estado impulsar la pena de muerte para narcotraficantes.
De acuerdo con el republicano, esta sentencia es una vía para poner fin al narcotráfico. El político asegura que en los países donde está permitida, la mayoría de Asia, no existen problemas relacionados a drogas ilegales.
Una pregunta elaborada por el gobernador de Carolina del Sur, Henry McMaster, cuestionaba cómo es que el presidente le haría frente al consumo de fentanilo a través de paquetes postales que llegan desde China.
Trump le contestó diciendo que ya ha tocado el tema con el presidente de China, Xi Jinping, donde la pena de muerte esta.
“Si te fijas, en todos los países que tienen la pena de muerte no hay ningún problema de drogas (…) Ejecutan a los traficantes de drogas. Y cuando lo piensas, es muy humano, porque cada traficante de drogas, en promedio, mata al menos a 500 personas… No sé si nuestro país está preparado para eso. Yo sí lo estoy”, respondió Trump el presidente.
Esto sucedió durante la reunión de la Asociación Nacional de Gobernadores llevada a cabo este viernes, el mandatario aprovechó para pedir a los gobernadores, tanto republicanos como demócratas, que los estados consideren aplicarla.
“Sus estados tienen el derecho de aplicar la pena de muerte también a los traficantes de drogas (…) Pero háganlo solo si quieren deshacerse de las drogas”, reiteró el presidente.
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