México.- Diez mil juguetes del último siglo evocarán en una exposición la época dorada de la industria juguetera mexicana (1930-1970), cuando en el país proliferaban las fábricas y la producción juguetera artesanal, dijo hoy el curador de la muestra Roberto Shimizu.
El Museo del Juguete Antiguo de México dará lugar a la exposición "Juguetes Mexicanos 1900-2000" que a partir de mañana abre sus puertas al público en Ciudad de México.
Ahí podrán apreciarse juguetes que fueron elaborados entre 1900 y 1970, tanto en casas y talleres de herrería y carpintería, como en pequeñas y grandes fábricas.
"Entonces los juguetes se hacían para divertir, formar y unir, ahora lo importante es que los consumas, te aisles y al final los deseches", dijo en declaraciones a Efe Shimizu, un dedicado coleccionistas de juguetes.
Juguetes que, según el coleccionista, fueron los más significativos de la historia del "boom" juguetero de México estarán presentes en la exhibición.
Tal es el caso de la llamada "carcachita" (carro) de lámina, un barco ensamblado de madera estilo art deco, bloques para armar la Torre Latinoamericana (otrora el edificio más alto de la capital) y una locomotora eléctrica.
La exposición se divide en tres secciones: juguetes mexicanos de carácter patriótico, juguetes de plástico y juguetes piñateros o de plástico soplado.
"Los piñateros fueron juguetes para todos porque además de que eran muy duraderos y vistosos, eran los más económicos", explicó Shimizu.
En dichas secciones podrán apreciarse algunos juegos de mesa como la bolsa de valores y las damas chinas, un teatro de títeres de cartón, un estuche de química, figuras de yeso de luchadores y una estufa eléctrica.
También juguetes de madera como el yoyo y el balero, una autopista, una colección de barbies, una casa de muñecas hecha de madera y una colección de aviones.
Durante los años de oro de la industria juguetera en México los principales fabricantes nacionales fueron marcas como "Lily Ledy", que hizo la barbie mexicana, "Cipsa", "Jugarama" y "Ensueño".
Actualmente la industria mexicana prácticamente es inexistente, y cerca del 90% de los juguetes que circulan en el país son de origen chino.
"Lo hecho en México está desapareciendo", decretó Shimizu.