TIJUANA – Militares en la calle, inmigrantes tratando de alcanzar "el sueño americano", miles de víctimas de "una guerra fallida" contra el narcotráfico, el poder de Televisa para decirnos "lo que existe y no existe" en el país, llegar a Dios a través de la oración o de un aria de Johann Sebastian Bach.
Que no se confunda, no se trataba de los encabezados de un noticiero o de la crónica de la realidad de México, sino del último concierto en la ciudad de la Orquesta de Baja California bajo el título "Degenere(o)s musicales", un cabaret didáctico con Hernán Del Riego y la soprano Ruth Polio.
Ellos recrearon el cabaret de sátira social y política que a puerta cerrada concentra en su anfitrión y protagonista el sentir de la gente de la calle.
El espectáculo fue presentado la noche del jueves en la sala de espectáculos del Centro Cultural Tijuana ante unas 800 personas, que despidieron de pie a los artistas con aplausos y vivas.
Lo que habían presentado era uno de esos shows que la gente recuerda por muchos años, porque fue posible que pasara de la carcajada a la tristeza, de la reflexión a la indignación, eso en tiempos en que parece que la indolencia es el pan de cada día.
Del Riego comenzó el concierto con su composición "No podría estar peor", una cantaleta de las cosas malas en México que de tan malas o tan cotidianas se vuelven indiferentes y ya hasta no se observan con desagrado.
Desde ahí se advirtió que todo acto solemne en el concierto sería tomado con sarcasmo o ambigüedad. El mismo director artístico de la OBC, Eduardo García Barrios, un hombre altísimo y de carácter severo e imponente, entraría a ese juego: mezcla de ficción, teatro y musical.
Luego de que el ensamble interpretara unas bellísimas arias judeocristianas de Bach, dándole al público un trozo de la atmósfera del Renacimiento alemán; los músicos pasaron a lo que llamaron "Operada", una parodia de ellos mismos y de la migración en la línea fronteriza.
En esta "Operada", García Barrios vistió de pantaloncillos cortos y cachucha de "migra"; la soprano Ruth Polio hizo de "Juana", una vendedora de burritos con cangurera, visera y hielera que ha intentado cruzar "al otro lado" en múltiples ocasiones pero siempre la detienen, mientras que Del Riego hizo "Cruz Margarito", el chicano ángel salvador de "Juana" con camiseta de los Lakers.
Los sketches ópera fueron uno de los momentos más hilarantes del concierto y donde los artistas expusieron su piel multifacética de músicos, cantantes y actores.
Sin que perdieran el ritmo de un cabaret, siguió después la interpretación de la OBC de la "Suite de la ópera de los 3 centavos", del músico Kurt Weill y el poeta y dramaturgo Bertolt Brecht, otro pedazo emocional electrizante que hizo cambiar la atmósfera del teatro de un instante a otro.
El concierto cerró con las piezas "María", "Tonight" y "Somewhere" de la obra "West Side Story", el Romeo y Julieta musical de la cinematografía estadounidense.
En su conjunto "Degenere(o)s musicales" es un espectáculo brillante, con una fuerza sentimental, crítica, política y social de muy largo aliento; es de esos shows de calidad que se presentan en la Ciudad de México y que sólo cuando la gente los ve allá comienza a hablar de ellos.
Este "cabaret" funcionaría para comenzar el concepto de temporada de un espectáculo en esta frontera, aunque resulta muy extraño que un show de esta fuerza no haya abarrotado el teatro, más aún cuando se cobraba un precio muy bajo que fluctuaba entre los 25 y 150 pesos.
Para quien no lo haya visto o lo quiera repetir, la OBC presentará este show este sábado a las 8 de la noche en el Centro Estatal de las Artes en Ensenada.
Omar.millan@sandiegored.com