ENSENADA.- A dos meses de su apertura, ya ha recibido más de 20 mil visitantes.
El pasado viernes, el presidente de México Felipe Calderón inauguró formalmente el Museo de la Vid y el Vino ubicado en el corazón del Valle de Guadalupe, un espacio dedicado a promover los logros de la región en dicha industria, además de impulsar el turismo y la historia.
La propiedad donada por Don Luis Agustín Cetto, cuenta con una extensión de 2.7 hectáreas y se ubica a un costado de la carretera Tecate El Sauzal, por lo que es de fácil acceso para los visitantes.
El proyecto tuvo una inversión de 76 millones de pesos de los cuales, un tercio provenían de fondos del gobierno federal y se anticipa, la edificación fungirá como detonante para impulsar la ya conocida Ruta del Vino del Valle de Guadalupe y en un futuro, convertir a Ensenada en "capital del vino" en Latinoamérica.
Por su parte, el director del museo Gabriel Díaz García de León, explicó que el inmueble está dividido en cuatro áreas.
En la planta baja se exhibirá la parte histórica que abarca desde los primeros vestigios de vino en la humanidad hasta la llegada de los misioneros a Baja California. Asimismo, se encuentran salas dedicadas a "industria, identidad y arte" del vino y la vid de la región.
Adentro se observa una importante colección de botellas, artefactos utilizados para la producción de vinos, además de pinturas.
La museografía fue proporcionada por la Universidad Autónoma de Baja California, la única con Escuela de Enología en todo el país.
En la parte alta se encuentra un área disponible para eventos con una vista panorámica al Valle de Guadalupe.
El diseño corrió a cargo del arquitecto ensenadense Eduardo Arjona y su construcción tomó cerca de un año. Las paredes del inmueble son a base de piedra local y para su corte se contrataron especialistas provenientes del sur del país quienes estuvieron viviendo cerca de cuatro meses en la región.
Díaz García de León, definió el diseño del museo como "contemporáneo y autosuficiente". Desde el cielo, la estructura dibuja la letra V, en relación a "vid" y "vino".
Se estima que cerca de 300 trabajadores estuvieron involucrados con el proyecto.