En México se está viviendo un cisma político, una crisis de crisis, un momento de mitomanía por parte de quienes gobiernan. Pues el discurso de austeridad no concuerda con los hechos. En Baja California tenemos el reflejo inmediato de esa crisis, un distanciamiento por parte del Estado que deja al ciudadano en el campo de batalla, en fuego cruzado, mientras los representantes se anidan en espacios de relajación y confort.
Veloz propone un nuevo gobierno, uno que construya una sociedad más solidaria, más humana, en donde abunde la fraternidad y la camaradería. Y el primer paso ya está hecho, pues si Veloz no hubiera encabezado las acciones para revertir la Ley Bonilla, tendríamos al actual gobernador desmantelando el Estado por tres años más.
Es preciso circular una invitación permanente para los jóvenes, mujeres, adultos mayores, ciudadanos y ciudadanas, para caminar con determinación hacia adelante. Pues para Veloz el pueblo tiene el derecho innato a gobernar, a ser participantes de las políticas públicas y resolver las urgencias de la comunidad. Pues solamente escuchando al pueblo e integrándolo en la planeación, aplicación y evaluación de los programas sociales, puede lograrse la mejora.
“Somos la mayoría los que queremos un cambio real, pacífico y democrático”, por las palabras de Veloz.
En la siguiente liga pueden encontrar la propuesta.
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