Tijuana

Valle de Guadalupe: la encantadora ruta del vino bajacaliforniana

Nuevos sabores en cada visita

Por Kristin Díaz de Sandi2012-07-13T18:46:40+00:00

Estar en El Valle de Guadalupe siempre trae una sensación de serenidad de la que nunca tengo suficiente. En nuestro más reciente viaje celebramos el Día del Padre. Es raro que tengamos un programa o planes previos, generalmente vamos allí y nos dejamos llevar por el momento. Cuando el estómago es quien manda, uno nunca sabe en dónde terminará. En esta ocasión nuestra primera parada fue en un pequeño puestecito al lado de la carretera que decía "Barbacoa". Así que, como ya lo adivinaron, nos detuvimos por Barbacoa y tacos de lengua, también. El aroma de la carne de cordero era hipnotizante.

Honestamente, son las paradas para comer al azar con su simpleza y calidad, lo que me hacen amar la comida mucho más. Puedes pensar que es posible ahora, pero todo está en el mundo de la exploración.

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Pasamos parte de nuestra tarde bajo la sombra de los árboles en la Viña de Liceaga. Necesitábamos refrescarnos bajo el sol de 34°C mientras tomábamos nuestro vino, ¿cierto? Amo absolutamente el caminar de la mano con mi hijo, Giovanni, disfrutando de la hermosa vista. Antes de darnos cuenta, bebimos la última gota de vino y estábamos de regreso en la carretera.

Entre la Viña de Liceaga y los Viñedos Emevé nos las arreglamos para detenernos por unos pies de manzana, pan ruso y queso recién horneados. ¡Yo jamás rechazaría algo con queso! Uno de mis descubrimientos favoritos fue, de hecho, la jalea de Pétalo de Rosa. El solo acercar la nariz al frasco para olerla es una experiencia especial. Salimos del lugar con nuestros mini pies, pan y queso; pero claro, eso no significaba que no teníamos lugar para más vino y comida.

Silvestre fue la última parada de este viaje. Esta es su primera semana que están abiertos esta temporada, de hecho. Déjame decirte, el paisaje por sí solo te quita el aliento. Creo que tuve una especie de visión de túnel involucrando viñedos y tuve mi propio escape por un par de minutos. No hay un menú. Ellos se acercan a ti con una pizarra que tiene los especiales del día escritos y todo se prepara en una parrilla de mezquite. Para despertar tu paladar te presentan un tentempié de jícama bañada en jugo de lima y chile seco en polvo. Sólo ordenamos un par de platillos del menú, tomando en cuenta que estuvimos comiendo todo el día. Definitivamente me gustaría regresar y pedir todos los especiales ofrecidos ese día. El pollo a la parrilla estaba a reventar de sabor ¡Y tan jugoso! Siendo sincera, no elijo pollo con frecuencia pero éste me hizo empezar a cuestionarme el por qué. Los esponjosos panecillos con trocitos de hierbas que contenían el cerdo estaban absolutamente deliciosos. Los ingredientes que llenaban los bollos eran salados y ahumado con un crunch extra de parte de la guarnición. Como seguramente ya lo saben, amo cualquier comida con textura interesante.

Respirar el aire fresco y disfrutar una deliciosa comida fue el final perfecto para este Día del Padre.

¡Hasta la próxima, mi querido Valle de Guadalupe!

Viña de Liceaga

Km. 93 carretera Tecate Ensenada

San Antonio de las Minas, BC

Direcciones aquí.

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Fam. Samarin

Principal 277

Valle de Guadalupe, BC

Vinícola Emevé

Parcela #67 Ejido El Porvenir,

El Porvenir, Baja California.