Los cruces fronterizos desde Tijuana hacia San Diego están llenos de sorpresas, algunas no tan placenteras y otras que sacan más de una sonrisa a los oficiales de la Customs and Border Protection (CBP), como lo es su caso más reciente en donde tuvieron que regresar a México a un cerdito.

De acuerdo a oficiales, esto sucedió el 11 de septiembre aproximadamente a las 08:30 am, cuando un viajero de 63 años junto a su nieta buscaban ingresar a Estados Unidos desde el puerto de entrada de Otay Mesa presentando sus documentos, después de declarar que contaban con un cerdo mascota dentro de vehículo, estos fueron enviados a una inspección adicional.

El animal fue identificado como un cerdo mascota miniatura color negro, al cual no se le permitió la entrada, especialistas agrícolas de CBP le informaron a los viajeros que no se podían ingresar cerdos vivos a Estados Unidos sin los permisos necesarios por parte del Servicio Veterinario; además, estos deben de estar regulados como ganado para que sean elegibles para ingresar desde otros países.

Si bien a muchos viajeros les gustaría cruzar mascotas de diferentes razas a los EE. UU., debemos asegurarnos, desde una perspectiva aduanera, de mitigar las posibles enfermedades de los animales que provienen de otros países… Es lamentable que algunos viajeros no puedan cruzar a sus mascotas, pero debemos seguir las pautas del USDA y los CDC para proteger a nuestros ciudadanos”, comentó Rosa Hernández, directora interina de operaciones de campo de San Diego.

Oficiales aseguraron que el pequeño cerdito se fue haciendo “wee wee wee” mientras iba a casa después de que fuera enviado de regreso a México de manera voluntaria. De acuerdo a CBP, algunos animales pueden ser detenidos mientras se espera su disposición a expensas del gobierno, mientras que roedores africanos, murciélagos, primates no humanos y civetas no pueden ser importados como mascotas bajo ninguna circunstancia.

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