She-Hulk: Attorney at Law es actualmente uno de los títulos más polémicos de Marvel, tanto por los comentarios malos como la impresión por parte de los espectadores, los cuales se impactaron por la actuación de Tatiana Maslany. Cuando los primeros capítulos fueron estrenados, muchos se impresionaron al encontrar un material muy interesante además de novedoso, mientras que las críticas negativas comenzaron a llover.

She-Hulk sigue la vida de Jennifer Walters luego de convertirse en Hulk por tener contacto con la sangre de su primo. Durante el primer episodio vimos cómo la abogada pasó un tiempo entrenando para controlar su ira, pero resultó muy buena en eso porque, como le explica a Banner, ha tenido que hacerlo toda su vida para evitar ser considerada una mujer histérica. Este simple comentario provocó olas de críticas que aseguraban que el feminismo en la serie era tóxico y que ponían a todos los hombres como tontos o débiles, algo que estaba muy alejado de la realidad.

Aunque la serie está lejos de ser perfecta, cumple con lo que quería hacer, que era dar una visión diferente de una mujer que debe lidiar con problemas actuales que no se limitan al mundo de los superhéroes. Las relaciones románticas, los conflictos laborales y los ataques constantes hacia su persona, sólo se vuelven más públicos y complicados con la figura de She-Hulk, pero siempre han estado presentes en su vida. El asunto es que sí esto ya era desastroso para algunos, el final de temporada, que rompe con todas las convenciones de Marvel, causó otro tipo de caos.

Algunos tomaron el final como un gran homenaje a los cómics de la heroína, pues en más de una ocasión se ha encontrado ahí con sus creadores. Otros consideraron que era el mejor ejemplo de lo que unificaba temáticamente la serie: la necesidad de Jennifer de encontrar equilibrio, autonomía y control sobre su propia narrativa. Pero para unos cuantos, se trató de una mala ejecución por no saber qué hacer con la protagonista o las tramas que abrieron al comienzo. Lo que no se puede negar nunca es que She-Hulk es la obra menos convencional que nos ha dado Marvel.

Simon Pegg, más conocido por cintas como El Desesperar de los Muertos - 92% y Star Trek - Sin Límites - 84%, publicó un video donde dice que terminó de ver el último capítulo de She-Hulk y está convencido de que es lo mejor que la compañía nos ha dado desde Avengers: Endgame - 95%. El intérprete dice que agradeció la flexibilidad en la historia y la comedia en la misma, además de elogiar particularmente a Tatiana Maslany:

Simon Pegg: “She-Hulk es lo mejor que ha hecho Marvel desde Endgame. Tatiana Maslany es lo máximo y me gustaría casarme con ella en una dimensión alternativa.

Para los fans de Simon Pegg este video es bastante revelador, pues en más de una ocasión él ha dicho que no le gustan las películas de superhéroes y que, a diferencia de otros actores, él no encuentra particularmente atrayente el unirse a Marvel, pues no cuentan con roles interesantes. Algunos creen que este video es prueba de que She-Hulk logró separarse con éxito del resto de los títulos del UCM, pero otros creen que Pegg está siendo sarcástico y el video es una forma de burlarse de la serie.

Sea como sea, She-Hulk dio mucho de qué hablar con cada uno de sus episodios y logró adelantarse a muchas de las críticas misóginas y superficiales que sabían que llegarían sólo por existir. En ese sentido, la serie resultó más meta de lo esperado, algo que agradó bastante a sus fans. Además, la aparición de Daredevil, y su química con Jennifer, causó gran emoción entre los seguidores del héroe que quieren ver más de esta relación en Daredevil: Born Again. Ya que muchos no se imaginan, al menos de momento, a She-Hulk en las películas, se piensa que la mejor opción es una segunda temporada, pero Marvel no ha dicho nada al respecto todavía.

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