A través de redes sociales se realizó una encuesta popular a la comunidad de Tijuana en la cual se buscó calificar o evaluar el trabajo de los servidores públicos del municipio. El primero en ser juzgado por los habitantes de la ciudad de Tijuana fue el síndico procurador, Rafael Leyva.

La encuesta fue realizada por el medio de noticias TJ Comunica, y se rescató el sentir de los residentes fronterizos, quienes reprueban totalmente al síndico. La evaluación fue realizada a través de la red social Facebook, exclusivamente para la misma ciudad.

Se le cuestionó a la ciudadanía, cómo evaluaba el primer año de trabajo del Síndico. La encuesta cerró el día de ayer jueves y finalmente 705 personas participaron.

En la encuesta participaron 315 usuarios reales, quienes 180 desaprobaron las labores realizadas por Rafael Leyva, mientras que 135 piensan lo contrario. Como es de esperarse durante la encuesta hubo la participación de bots que facebook se encargo de suprimir. En definidas cuentas el síndico se queda con un porcentaje del 25% en desacuerdo con las acciones que ha realizado, mientras que un 19% sí lo acepta.

No debe extrañar a nadie los resultados de la encuesta realizada. Rafael Leyva ha mantenido, desde que comenzó a ocupar el cargo, una serie de problemas extracurriculares envuelven su nombre, comenzando por mantener dentro de su escolta a Roni Alexander Serratos Ramos, quien está acusado de violar a un hombre con un palo de madera, además de propiciarle una golpiza junto a otros cinco hombres.

Otros casos no han sido atendidos a lo largo de este año, quedando archivados y por consiguiente, han quedado impunes. La labor del síndico procurador, hay que recordar, es que se prevalezca el orden y la justicia a favor de los ciudadanos tijuanenses frente a los abusos de poder de los servidores públicos. Esto no ha sucedido durante su administración.

Hace unos días, San Diego Red publicó una nota recientemente sobre un caso de abuso físico y verbal por parte del secretario personal del Director de Justicia Municipal de Tijuana, el licenciado Julio Alfonso Barroso Ramírez, su asistente, Juan Jaime Ojeda fue acusado por su pareja sentimental de haber sufrido agresiones físicas y verbales, además de estar bajo los efectos del alcohol y las drogas. Hasta el momento el asunto parece haber quedado archivado. Una vez que los oficiales de policía llegaron al lugar de los hechos, bastó que el secretario se identificara para que lo dejaran ir.

Al comienzo de su administración, Rafael Leyva mencionó que durante su tiempo a cargo, no prevalecería el amiguismo ni nepotismo. Sin embargo, los resultados no dicen lo mismo. Parece ser que estamos frente a una administración nuevamente de cuates, donde los actos que violan la ley, son permitidos para los amigos de los servidores públicos.

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