De la serie de hechos que se suscitaron el pasado 22 de agosto del presente año, retomamos el que corresponde a Jovan García, quien habría sido víctima del abuso de poder de las autoridades municipales de la ciudad de Tijuana.

Según lo que comenta, Jovan había salido desde Los Ángeles hasta la ciudad de Tijuana el 22 de agosto del presente año. Durante su cruce fronterizo, fue interrogado por personal del SAT, quienes lo interrogaron sobre la cantidad de dinero que portaba. Jovan comunicó que contaba con la cantidad de 9mil dólares, mismo que utilizaría para el pago de un terreno en 4 sección.

Raramente, el personal del SAT no duda sobre la cantidad de dinero con la que cuenta Jovan; sin contar el dinero, se abstienen en decir que la máxima cantidad para evitar declaraciones fiscales, son 10 mil dólares, y lo dejan continuar.

Momento después, con dirección al florido, justo a la altura de central de abastos en la vía rápida, es detenido por una patrulla de policía municipal en Tijuana. Los oficiales, según lo que declara la víctima, nunca se presentaron ni dieron razón para pedir la detención del vehículo. Rápidamente le preguntan si trae dinero.

Jovan decide grabar las acciones de la policía municipal sin que ellos, en un primer momento, se den cuenta. Cuando el oficial pudo percatarse que estaban siendo grabados, intenta quitarle el teléfono y en medio del malestar, le propicia un golpe a Jovan que lo deja sangrando de la boca.

La víctima declara que, cuando comenzaron a producirse los hechos, temeroso de que se tratara de situaciones similares a las que había ocurrido semanas antes, donde la violencia ejercida por grupos criminales paralizó a la ciudad, comenzó a correr olvidándose de su auto y su dinero, el cual fue hurtado por lo policías.

Llega a una estación de gasolina cercana y pide ayuda; llegan los mismos policías que lo habían golpeado minutos antes, para atender el llamado del encargado de la gasolinera. Minutos después otras tres patrullas arribaron al lugar de los hechos, entre ellos, al jefe de la zona.

Las autoridades, en lugar de mostrarse en condiciones de ayudar a la víctima, se limitaban a decirle que llamarían a una grúa por dejar el auto abandonado en medio de la carretera. Cuando Jovan comenzó a explicar la situación, el jefe de los policías, le dijo que quien lo había golpeado, habían sido otros agentes, de un auto blanco, y no los municipales.

La situación terminó de esta forma, sin resultados favorables para la víctima. Ya se ha presentado una denuncia fiscal en contra de los oficiales; el próximo 03 de noviembre deberá atender a un proceso de identificación para señalar a los oficiales que lo agredieron.

Un hecho dentro de la narración llama la atención. Este es cuando el jefe de los oficiales, asegura que quien lo golpeó y hurtó el dinero era transportado en un auto blanco. ¿cómo sabía esta información?.

Otro dato curioso es en el momento en que cruza a la ciudad de Tijuana y personal del SAT no procede a revisar la cantidad de dinero para corroborar que sea la referida por la víctima en cuestión; tales actitudes no corresponden a la muchas veces acosadora actitud del SAT. ¿Qué relación existe entre las actitudes desinteresadas del SAT y el hostigamiento de la policía municipal? si creemos en tal declaración y con base a experiencias de la misma índole en días pasados, cabe suponer que los oficiales sabían que el sujeto en cuestión transportaba dinero.

Mientras tanto y como muchas otras situaciones de la misma índole, no hay certezas de resoluciones próximas, hábrá que esperar la fecha próxima de 03 de noviembre o que se suscite otro caso de abuso de poder por parte de las autoridades.

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