En latinoamérica existe un término que es utilizado entre las personas, el cual es conocido como "lágrimas de cocodrilo", este hace referencia a alguien que llora falsamente y a partir de la publicación de un director ejecutivo de una empresa, usuarios en redes sociales aseguran que este está realizando dicha acción

Esto, luego de que publicara una selfie llorando en su perfil de LinkedIn, diciendo que había despedido a algunos de sus empleados y que sentía mucha pena por esto.

Se trata de Braden Wallake CEO de HyperSocial, una empresa que se especializa en optimizar las publicaciones de justamente, LinkedIn. En el post, dice que la foto llorando y su declaración, ha sido “la cosa más vulnerable que jamás compartiré”.

“En días como hoy, desearía ser dueño de un negocio que solo se preocupara por el dinero y que no me importara a quién lastimó en el camino. Pero yo no. Entonces, solo quiero que la gente vea, [sic] que no todos los directores ejecutivos son insensibles y no les importa cuándo tienen que despedir a la gente. Estoy seguro de que hay cientos y miles de personas como yo”, indicó Wallake.

La publicación generó varios comentarios de personas molestas, como: “¿Qué tal usar su red para ayudar a esos empleados a encontrar nuevos trabajos etiquetándolos y poniéndolos en el centro de atención, en lugar de quejarse por tomar decisiones difíciles como líder y publicar una selfie llorando? Esta es una de las publicaciones más fuera de contacto que he visto en mucho tiempo”. Acusaciones que luego el aludido respondió diciendo que sí lo hizo, además de contestar muchos de los otros comentarios donde lo atacaban.

Además, indicó que solo estaba tratando de mostrar las dificultades que atraviesan los dueños de negocios cuando no tienen otra opción que promulgar despidos, en declaraciones entregadas al sitio Motherboard.

Estaba sentado aquí en mi escritorio, simplemente llorando, supongo, y decidí hacer la publicación porque he visto mucho en LinkedIn recientemente sobre lo terribles que son los dueños de negocios y los directores ejecutivos por despedir a sus empleados y que estamos despidiendo empleados mientras obtienen su tercera casa en las Bahamas o donde sea”, dijo Wallake.

Luego de todas las críticas que recibió luego de su publicación, admitió que la foto le causaba vergüenza, pero que de todas formas se sintió alentado ya que con todo este revuelo, otros empresarios respondieron diciendo que estaban interesados ​​en contratar potencialmente a los empleados que tuvo que despedir.

Nota publicada originalmente en Tarreo.

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