El desgaste económico provocado por la pandemia, y en consecuencia las dificultades de la cadena de suministros procedentes de China, así como el conflicto entre Rusia y Ucrania, han provocado un aumento en la inflación, mayor a décadas anteriores. En medio de todos estos conflictos, la incertidumbre también ha ido en aumento y con ella el miedo, provocando una reacción negativa en inversionistas.

BBC Mundo consultó a cuatro economistas de renombre, sobre si el mundo está en peligro de caer en una recesión próximamente. Tres de ellos coincidieron en que es posible que suceda durante los primeros meses del 2023. Sobre las causas que pueden provocar esta recesión, son los ya conocidos sucesos globales o que tienen consecuencias globales. La pandemia, la inflación, el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, son las principales causas.

La gente viajará, gastará y muchos disfrutarán de esos cheques de asistencia financiera que los gobiernos en campañas electorales durante la pandemia repartieron a diestra y siniestra. Pero las fiestas no duran para siempre, como ningún deportista de élite puede desempeñarse por siempre bajo los efectos del dopaje.

Gabriel Gasave, investigador asociado del Centro para la Prosperidad Global del Independent Institute y director de Elindependent.org (Oakland, California)

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La pandemia puede afectar a Estados Unidos, directamente. La causa: los cheques financieros que su gobierno repartió como ayuda para sus ciudadanos terminará, así como el derroche económico provocado en los primeros días de la pandemia. A ese hecho, se agrega otro aspecto importante que afecta a los Estados Unidos; su relación con China y el hecho de que, a pesar de que el comercio global volvió a funcionar, la pandemia no ha terminado, provocando una serie de dificultades en la serie de suministros que llegan de China, así como un gasto que no ha parado a consecuencia de las víctimas del COVID-19.

El panorama que enfrenta México frente a esta posible situación, es igualmente preocupante. Basta recordar que aproximadamente el 30 por ciento de la economía mexicana proviene de los Estados Unidos, a través de las remesas. Lo cual tendría un impacto directo si comienzan los estragos de una recesión.

Manuel Somoza, de Milenio Noticias y que es presidente de Estrategia de CIBanco menciona que una de las formas de neutralizar una crisis como la que se avecina es impulsando internamente, los programas de inversión detenidos los últimos tres años, a consecuencia de las dificultades provocadas por el Gobierno Federal. Con el intento de fortalecer las empresas estatales, el Gobierno del país, ha provocado un estancamiento de la inversión privada.

A pesar de que no puede saberse cuándo y cómo sucederá la próxima recesión, es alarmante el hecho de no tener una estrategia económica por parte del Gobierno de la República.

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