El tiroteo en el campus de un hospital en Tulsa, Oklahoma, dejó cinco muertos, más el pistolero (quien se suicidió), según la policía: entre las muertes se cuentan la de dos doctores, un paciente, y dos empleadas. Sobre los doctores, resultó que uno de estos había sido médico del tirador.

Ahora se sabe que el pistolero, Michael Louis, quien se suicidó luego de cometer este violento crimen, había ido al hospital para una cirugía en la espalda el pasado 19 mayo y posteriormente había ido varias veces debido al dolor.

Así lo confirmó Wendell Franklin, el jefe de policía de Tulsa, quien completó diciendo justamente el miércoles, el pistolero llamó a la oficina del doctor para atención adicional y se quejó de un intenso dolor en la espalda. Esto sucedió tan sólo unas horas después de que el tiroteo iniciara.

Asimismo dio a conocer que no fue nadie del hospital quien llamó a la policía, sino que fue alguien que estaba en una videollamada con un médico que sí lo estaba, la que llamó al 911. Cabe destacar el tirador culpó al doctor por su dolor continuo después de la cirugía.

Este es el tiroteo masivo número 233 que ocurre en el año 2022, no obstante, ha sido el tiroteo en Uvalde, Texas el que más se llevó la vida de inocentes, ya que fueron asesinados 19 niños y 2 maestras que buscaban protegerlos.

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