Una acción amenaza las relaciones entre México y Estados Unidos y a su lucha contra los grupos del crimen organizado debido a que las autoridades mexicanas cerraron una unidad antinarcóticos que iba de la mano con la Administración para el Control de Drogas (DEA, en inglés).

Este grupo era una de las unidades especiales que tiene Estados Unidos y forma parte de una red que opera en aproximadamente 15 países los cuales el gobierno norteamericano considera importantes para lograr el desmantelamiento de redes de contrabando y así llegar a líderes de la mafia.

Cabe destacar que el gobierno de López Obrador informó al gobierno estadounidense desde el año pasado que la unidad sería clausurada y según una fuente familiarizada no es posible detallar la situación sobre el cierre.

No obstante, esto se podría reflejar de manera trágica en Estados Unidos, ya que 2021 fue el año en que hubo 100 mil muertes a causa de sobredosis provocadas por nuevas drogas sintéticas producidas por los cárteles mexicanos.

El equipo clausurado fue creado en 1997 con el objetivo de que la DEA compartiera con el gobierno de México información delicada sobre envíos de drogas y pistas sobre las investigaciones. Ante esto, el Mike Vigil, exjefe de operaciones internacionales de la DEA comentó que lo anterior: “Significará más drogas yendo a Estados Unidos y más violencia en México”.

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