De acuerdo con el diario estadounidense ''The Washington Post'', recientemente Rusia reveló haber cerrado el acceso a la red social 'Instagram' este lunes 14 de marzo a los cerca de 60 millones de usuarios del territorio.
El regulador Roskomnadzor tomó esta decisión luego de enterarse que Meta supuestamente permitió durante un período de tiempo permitir a ciudadanos ucranianos exigir la muerte del presidente ruso Vladimir Putin, así como de los soldados que atacaban su hogar bajo su mandato.
Informes señalan que Meta cambió su orientación tras recibir dichos reportes por parte del país euroasiático, además una publicación interna filtrada del presidente de asuntos globales, Nick Clegg, reveló que la compañía estaba ''estrechando el enfoque'' de su política para detener una vez más los llamados a la muerte de Putin, además de advertir a la gente que pese a la terrible situación que acontece en Europa, no debe dejarse llevar ni desear el mal a nadie.
Si bien, aún no es seguro si algún ruso es capaz de acceder a Instagram a través de VPN, se informó que algunos usuarios no pudieron usar esos túneles de conexión para eludir la prohibición.
Uno de los grupos más afectados con esta decisión son los creadores de contenido en Instagram, quienes han solicitado a sus seguidores que se unan a ellos en la aplicación de chat segura ''Telegram'', la cual se popularizó tras el conflicto bélico conservandola hasta el momento como uno de los poco medios de comunicación relativamente privados y resistente a la vigilancia.
Cabe destacar que a pesar de que Rusia considere aceptable la guía revisada de Meta, es poco probable que revierta el bloqueo de la plataforma en el territorio, pues su postura con los medios se encuentra muy tensa y más con la ley recién emitida que sanciona hasta con 15 años de cárcel a las personas y medios que publiquen contenido que desafíe la línea oficial del gobierno sobre Ucrania.
Mientras se dice que agentes desconocidos han colaborado con la administración de Putin para silenciar la disidencia política pagando a estrellas rusas de TikTok para difundir mensajes a favor del Kremlin, las grandes tecnológicas han impedido que medios de comunicación rusos utilicen sus plataformas para divulgar información falsa, sobre todo en lo que respecta a usuarios europeos.
Por su parte, Google impidió que internautas en Europa accedan a los canales de YouTube de RT y Sputnik, mientras que TikTok deshabilitó las cuentas europeas de dichos medios.
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