Utilizar a menores de edad para pedir limosna en las calles, aún con el consentimiento de los padres, podría ser castigado por una sanción económica o hasta cárcel.

Esta iniciativa está siendo analizada por el Congreso de Baja California y es una propuesta del diputado Julio César Vázquez; el objetivo es que los niños salgan de las calles y se les brinde educación, frenando así los cientos de casos de proliferan en la ciudad.

Las autoridades han detectado que existen muchos adultos que sí pueden trabajar, pero utilizan a los menores para obtener ingresos fácilmente.

Vázques señaló: “Quizás puedan tener la autorización de sus padres, hasta en un documento, pero esto no debe ser permitido”. Aclaró también que ha habido un aumento de menores pintados de payasitos hasta en los altos de las colonias y no solo en las avenidas principales de la ciudad.

La multa podría ser de hasta 500 salarios mínimos y de 3 a 7 años de prisión.

El diputado agregó que hay gente que engaña a personas, trayéndosela de otros estados con la promesa de una vida mejor, no obstante, las meten en bodegas y las utilizan para pedir dádivas.

Aunque se desconoce la cifra de los niños en esta situación, se trabajará con las instancias correspondientes para analizar la proporción y sancionar a los responsables.

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Con información de El Sol de Tijuana