Datos publicados por la oficina de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), ubicada en Puerto Príncipe, Haití, informan que el país caribeño ha recibido por lo menos a 3 mil 700 migrantes desde que comenzó la deportación en territorio estadounidense el pasado 19 de septiembre.

A través de un comunicado, se reveló también que cerca del 50% de la población migrante que ha sido repatriada está compuesta por niños, niñas y mujeres, los cuales llegaron a la nación entre el 19 y el 26 de septiembre en vuelos desde Texas con destino a Puerto Príncipe y Cap-Haitien.

Exceptuando las deportaciones llevadas a cabo por República Dominicana por vía terrestre, existen más de 13 mil haitianos que han sido repatriados desde inicios de año.

La ONU se mantiene preocupada por este tema, argumentando que se da justo cuando se encuentran en el llamado marco de “crecientes desafíos humanitarios y de protección” de la población haitiana, generando ‘presión adicional’ en instituciones y comunidades educativas que trabajan en diversas crisis nacionales.

Asimismo, la organización reiteró que gran parte de los habitantes de Haití enfrentan escasez o un difícil acceso a servicios básicos, tales como salud, vivienda o alimentación, razones clave que afectan aún más la vulnerabilidad de los migrantes, aunado a la violencia entre bandas armadas, falta de empleos y desastres naturales.

Se incentivó también a los países a cargo de apoyar el traslado de los migrantes a su lugar de origen que continúen en sus labores de ayuda, recordando siempre la importancia de respetar los derechos humanos de los ciudadanos en todo momento.

Las deportaciones iniciaron luego de la llegada masiva de migrantes a la frontera entre México y Estados Unidos, donde construyeron un campamento improvisado debajo de un puente ubicado en Del Río, Texas, el cual fue desalojado el viernes pasado.

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