La situación del campamento El Chaparral en Tijuana se está saliendo de control luego de que migrantes dieran testimonio de robos, violaciones, racismo, abuso de menores y violencia física.

A pesar de las acusaciones, no ha habido denuncias por parte de los migrantes, los cuales viven en condiciones deplorables desde hace más de cuatro meses. Se estima que en campamento habitan poco más de 2 mil adultos y niños de diferentes nacionalidades.

Las personas, quienes esperan en las inmediaciones de la garita de San Ysidro una resolución a su situación actual por parte del gobierno de Estados Unidos para ser aceptados como refugiados, podrían tener una nueva esperanza.

La tarde de ayer, haitianos, mexicanos y centroamericanos se encontraron con la representante del diputado federal Javier Castañeda Pomposo, quien buscaba convencerlos para trasladarlos a un “lugar seguro”.

Su nombre es Georgina Tovar Moreno y se identificó como la directora de una asociación civil denominada “Georgina y sus Ángeles de Ayuda”, quien intentaba brindarle a los migrantes una mejor atención, refugio, comida y trabajo en el Centro Integrador para el Migrante Carmen Serdán, un sitio administrado por el Gobierno Federal cuya capacidad es de 3 mil personas.

La activista mencionó que existen líderes del campamento que le han hecho creer a los migrantes que serán aceptados por el gobierno de Estados Unidos si se quedan viviendo en el campamento cercano a la garita, lo cual es completamente falso.

Destacó que a partir de hoy miércoles se iniciarán los traslados al centro integrados donde se les dará ayuda psicológica, legal, laboral y de salud.

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Con información de El Imparcial y AFN Tijuana