La biblioteca municipal Benito Juárez aun sigue sin contar con un nuevo espacio definido y sus instalaciones a la fecha lucen completamente vandalizadas.

A inicios del año, el gobernador de Baja California, Jaime Bonilla Valdez, planteó la posibilidad de que el edificio de correos de la Zona Centro sea la nueva sede de la biblioteca, sin embargo, con la campaña electoral que se atravesó y la mudanza del Centro de Gobierno a Imos, el asunto quedó en el olvido.

Aunado a eso, el deterioro del inmueble, ubicado en la avenida Negrete y Calle 11, es evidente: cristales rotos, paredes grafiteadas y un desgaste de pintura que lo hace ver como un recinto en ruinas. Poco mantenimiento se le ha dado a lo largo de los años desde su inauguración en 1954.

El sitio cuenta con tres niveles, el primero es para carteros, el segundo es para envíos y el tercero abarca las oficinas de administración.

La alcaldesa de Tijuana comentó el pasado mes de marzo que los dos edificios localizados atrás del de correos y telégrafos cumplían con los requisitos para albergar a la biblioteca municipal y la hemeroteca, por lo que prometió trabajar en el tema.

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Con información de El Sol de Tijuana