La asociación civil Safe Haven Crisis Line ha inventado un buzón para dejar a bebés abandonados cuyos padres no pueden cuidarlos.

El Safe Baby Box, instalado en las afueras de algunas estaciones de bomberos, funciona de la siguiente forma:

La persona va y abre el buzón, depositando al bebé en una incubadora. Una vez abierto el espacio este no puede volver a abrirse desde afuera, sino que el personal de bomberos recoge al niño dentro del edificio. Posteriormente se activa alarma silenciosa avisando a los servicios de emergencia 911, quienes se encargan de llevar en una ambulancia al recién nacido a un hospital cercano para darlo en adopción a una familia.

Una bombera explicó que los bebés permanecen un promedio de dos minutos dentro del buzón antes de ser atendidos por una persona.

Algunas personas en redes sociales calificaron la creación del Safe Baby Box como una medida para facilitar el abandono de bebés, mientras que otros aplaudieron la iniciativa.