Los magistrados del Tribunal Colegiado han aprobado por unanimidad la suspensión de las obras del Tren Maya en tres municipios de Yucatán, porque consideró que su construcción puede causar un daño significativo al medio ambiente.
La jueza tercera de Distrito de Yucatán otorgó la medida cautelar a los detractores del proyecto pues el avance el Tren Maya representa una pérdida de cobertura vegetal, así como un desplazamiento en la flora y fauna que sería irreversible.
Tras la decisión, el Gobierno de México deberá abstenerse de realizar nuevos tramos hasta que se logre llegar a un nuevo acuerdo. El Fonatur argumentó ante el Tribunal Federal que ya se tenía la autorización de impacto ambiental, sin embargo, los magistrados calificaron de inoperantes los alegatos en contra de la suspensión.
En los siguientes días, la juez federal deberá decidir si concede o no la suspensión definitiva. En caso de otorgarla, las obras nuevas que se pretenden realizar se mantendrán suspendidas hasta nuevo aviso.
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Con información de Milenio
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