El presidente municipal de Tijuana, Arturo González Cruz, está siendo investigado por una supuesta compra fraudulenta y por otras irregularidades por la Unidad de Inteligencia Financiera, según informó Santiago Nieto Castillo quien añadió que está prestando atención a esta situación.

Según informaron varios medios de comunicación, la compra que realizó (edificio con cinco pisos y un estacionamiento ) en marzo 2019 y que costó 22 millones de pesos, fue a una empresa que emite facturas falsas. Lo anterior representa un grave delito que podría tener como consecuencia la congelación de bienes.

El edificio en cuestión fue pagado de una sola exhibición y en dólares: en total un millón 100 mil dólares a la empresa llamada Inmobiliaria e Infraestructura Jalison. De acuerdo con el diario El Mexicano, esta empresa fue agregada a “la lista negra” del SAT en 2020 por emitir facturas inconsistentes.

De acuerdo con el medio antes mencionado, cuando se le preguntó al Alcalde de Tijuana sobre este hecho, terminó por culpar a una “campaña de desprestigio político en su contra”. Además no especificó de dónde vino el dinero para comprar el edificio. Éste se encuentra actualmente a nombre de los hijos de González Cruz.

Por otro lado, esta no es la única inconsistencia en la que ha visto envuelto el mandatario, hace unos días pidió un préstamo millonario al Ayuntamiento de Tijuana para saldar deudas, que de acuerdo con la síndico María del Carmen Espinoza, no se ha explicado satisfactoriamente cómo se originaron.

Además de lo anterior, el edil también ha sido criticado y hasta demandando por tráfico de influencias y abuso de autoridad debido a que rebajó cientos de miles de pesos de predial al Club Campestre de Tijuana, del cual llegó a ser presidente en años pasados.

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