El pasado 24 de Enero se estrenó en Netflix la serie documental “Conversaciones con un asesino: Las cintas de Ted Bundy”. En donde se narra a detalle el prominente caso de Theodore Bundy, un asesino en serie de mujeres que causó pánico en la población de Estados Unidos durante la década de los 70’s.

Bundy es conocido no solamente por los más de 30 homicidios que cometió, sino también porque fue el primero en cambiar completamente la percepción que se tenía de los asesinos. Y fue su caso el que motivó a crear una nueva división del FBI encargada de hacer perfiles psicológicos de estos criminales, con el objetivo de atraparlos con mayor facilidad, pues antes de Bundy el término “asesino serial” ni siquiera existía.

“Las cintas de Ted Bundy” ofrece la oportunidad de escuchar de la voz del mismo Bundy detalles sobre sus crímenes, gracias a las entrevistas obtenidas por dos reporteros, quienes lograron que el asesino hablara con ellos incluso antes de que éste confesara su culpabilidad en los homicidios.

De esta forma la serie de cuatro partes logra documentar de manera cronológica desde la infancia de Bundy y su carrera fallida como estudiante de derecho y político, hasta los horribles asesinatos y violaciones que cometió. Pero también es una historia sobre las limitaciones del sistema de justicia en los años 70’s, la facilidad con la que Bundy manipuló a las autoridades y lo surrealista del juicio al cual se enfrentó, el cual incluyó una extraña propuesta de matrimonio y al mismo Bundy tomando el papel de su propio abogado.

Detalles como sus dos escapes de prisión, su matrimonio y la familia que formó con Carole Anne Boone mientras se encontraba en espera de la pena de muerte, la increíble historia de la única sobreviviente a uno de sus ataques y la manera en la que asesinaba y torturaba a sus víctimas, son suficientes para helar la sangre de cualquiera. Es por eso que nuestra recomendación -y la de Netflix- es: No veas esto mientras estás sola en casa.

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