SINGAPUR.- La histórica cumbre del G7 en Singapur ha tenido como protagonistas a los que en otro momento se pudo haber dicho que eran enemigos políticos pero que ahora son aliados, Donald Trump y Kim Jong Un.
Con un apretón de manos y con banderas de ambos países de fondo, ante la prensa internacional Corea del Norte aceptó denuclearizarse, deshacerse de todas sus armas nucleares que podrían usarse ante una guerra.
Sin anunciar fecha para el inicio del proceso, Trump solo se limitó a decir que "muy pronto" y que confía en que Kim quiere hacer lo correcto.
"No discutimos eso, no. No vamos a jugar los juegos de guerra..." fue lo que dijo Trump cuando se le preguntó que si se habló de sacar las tropas estadounidenses del país coreano.
Por su parte, el coreano Kim Jong Un, señaló que la cumbre "traerá un enorme cambio al mundo".
Trump no se cierra ante una segunda reunión con su homólogo de Corea del Norte en este año en caso de que sea necesario donde espera recibirlo en la Casa Blanca.
Comentarios
Facebook
SanDiegoRed
Nuevos
Mejores