Miami, 24 jun (EFE).- "Miami All Stars" es una organización que ayuda a los jóvenes de bajos recursos del sur de Florida que sobresalen en baloncesto a acceder a la universidad a través de becas deportivas.
La mayoría de los jugadores de los Miami All Stars son jóvenes hispanos que provienen de familias monoparentales y de escasos recursos.
"Con el deporte podemos integrar a los chicos para que se puedan desarrollar como baloncestistas y como seres humanos", dijo a Efe Carlos Alamilla, director de la organización, quien agregó que es "importantísimo porque los chicos pueden aprender disciplinas, respeto, liderazgo y autoestima".
Sin embargo, el objetivo principal es que los jóvenes puedan rendir a un alto nivel en las canchas de baloncesto y conseguir becas para estudiar en las universidades de Estados Unidos.
"El programa de baloncesto de algunas universidades puede suponer contratos multimillonarios", señaló Alamilla.
"A las universidades que ganan campeonatos les supone una entrada de mucho dinero, de manera que quieren contar con los mejores jugadores. Por eso, estas instituciones educativas ofrecen becas completas, incluyendo la matrícula y la manutención de los estudiantes", añadió el director de los Miami All Stars.
"El baloncesto es la salida perfecta para muchos de los jóvenes con un nivel económico bajo. Para ellos, esto es una llave que sirve para salir de esas condiciones y poder estudiar", recordó Alamilla.
"Lo que queremos es que se gradúen de la secundaria y que continúen estudiando en la universidad gracias a las becas deportivas de las universidades de Estados Unidos", añadió el director.
Daniel López forma parte de los Miami All Stars y se interesó por la iniciativa porque "quería jugar en otras ciudades de Estados Unidos y a la vez estudiar en una buena universidad".
"En agosto haré las pruebas para poder jugar a nivel profesional. Mi sueño es jugar en la NBA y poder ayudar a mi familia", argumentó el joven estudiante.
Stephan Dimitrjevich, un jugador de 19 años, ya ha conseguido una beca para estudiar derecho el próximo curso en una universidad de Brooklyn (Nueva York), tras formarse en este equipo de Miami.
"Estoy muy agradecido a Carlos y a todo el equipo por haberme ayudado a formarme como persona y como jugador de baloncesto", relató el jugador.
El baloncesto es el segundo deporte en Estados Unidos después del fútbol americano.
Juan Carlos Pérez es el padre de uno de los jugadores del equipo y está muy satisfecho con el programa.
"Les enseña los distintos niveles de competición y, a la vez, lo pueden aplicar en la escuela para sacar los mejores resultados. Si nunca entrenas, nunca podrás jugar bien. Lo mismo pasa en la escuela: si no haces la tarea no saldrás adelante", expresó Pérez.
Esta organización de Miami está ligada con el primer equipo local de la NBA, los Miami Heat.
Alamilla comentó que cada año se organiza un campus de verano con la participación de algunas de las estrellas del conjunto floridano.
Además, algunos de los jugadores de los Miami All Stars tienen la posibilidad de formar parte de la 'Junior NBA', una liga de baloncesto juvenil a nivel nacional en la que participan más de 800.000 jóvenes estadounidenses.
La entidad se financia a través de donaciones privadas y subvenciones del gobierno.
Los chicos y chicas de entre 8 y 18 años que quieran jugar en esta organización pueden registrarse a través de internet en www.miamiallstars.org.
Según Alamilla, los chicos que quieran convertirse en parte del equipo deben cumplir con dos requisitos imprescindibles: pasión por el baloncesto y, sobre todo, ser un buen estudiante.
Aunque, por el momento, ningún jugador ha llegado a la primera línea profesional, el director se muestra confiado en que algunos de los jóvenes que ahora está formando puedan convertirse en estrellas de la Asociación Nacional de Baloncesto.
