Redacción EE.UU., 7 dic (EFE).- Hizo historia, Josh McDaniels, con sólo 32 años, fue elegido en el 2009 como entrenador de los Broncos de Denver para ser el más joven de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL).
Sólo han pasado 23 meses para que ya se encuentre en el paro y la imagen de no haber podido cumplir ninguna de las promesas con las que llegó al cargo.
Al contrario, los Broncos se han convertido en un equipo perdedor, sin personalidad y con muchos problemas dentro de la plantilla y de la organización.
De ahí, que los Broncos decidieron el despido de McDaniels, que paso de ganar los primeros seis partidos que dirigió con el equipo a tener marca perdedora de 5-17, incluida la de 3-9 que lleva en la presente temporada.
Pero quizás la gota que rebaso el vaso de agua fue el reciente escándalo de las grabaciones de vídeo ilegales que hizo el director de ese departamento de los Broncos, Steve Scarnecchia, a los 49ers de San Francisco, mientras se entrenaban en Londres antes del partido que ambos equipos disputaron el pasado 31 de octubre.
Aunque la NFL confirmó con la investigación que McDaniels no tuvo ningún tipo de implicación directa, no sabía de las grabaciones, al final fue multado con 50.000 dólares por ser el máximo responsable del equipo.
El pobre rendimiento deportivo del equipo y los problemas de imagen le costaron también a McDaniels la perdida del puesto cuando todavía le quedaban dos años más de contrato.
El entrenador de los corredores, Eric Studesville, fue elegido como entrenador interino para el último mes de la temporada regular que todavía falta en la competición de la NFL.
Studesville ocupará el puesto de McDaniels, de 34 años, cuya contratación por parte del dueño del equipo Pat Bowlen en enero del 2009 ahora es vista como un error monumental.
"Mi decisión de relevar del cargo de entrenador en jefe a Josh McDaniels no fue tomada a la ligera. Siempre apreciaremos su pasión, su entusiasmo y su trabajo duro y le agradecemos sus esfuerzos" declaró Bowlen en un comunicado después de despedir a McDaniels.
El dueño de los Broncos también fue categórico cuando dijo que no estaban satisfechos con los resultados conseguidos y de ahí que decidieron el cambio.
"Al final, no estuvimos satisfechos con los resultados y la dirección que había tomado el equipo. La decisión de hacer un cambio fue muy difícil, pero era necesario tanto para esta organización como para nuestros aficionados", destaco Bowlen.
El máximo responsable del equipo dijo que no era el momento de señalar a nadie en concreto de la mala temporada que estaban teniendo los Broncos.
"Todos, hasta yo me incluyo, somos responsables por nuestra decepcionante temporada y ahora debemos restaurar la cultura de la victoria que está establecida en el equipo. Toda nuestra organización está enfocada en regresar al nivel de prosperidad que nuestros aficionados esperan y merecen de los Broncos de Denver", subrayó Bowlen en su comunicado.
Por su parte, los jugadores desconocían del despido de McDaniels cuando salieron de las oficinas del equipo después de una carrera de acondicionamiento que concluyó alrededor de las tres de la tarde de ayer, lunes.
Poco después, McDaniels se reunió con Bowlen y fue despedido para que el ex entrenador pudiese reunirse con sus asistentes y comunicarles oficialmente su salida del equipo.
La decisión fue tomada después de que los jugadores ya se habían marchado a sus casas tras los entrenamientos, a los que han vuelto para ver que su nuevo entrenador es Studesville.
La breve trayectoria de McDaniels al frente de los Broncos generó una serie de errores con elementos del equipo que al final también le han pasado factura.
Uno de ellos fue dejar marchar a Peyton Hillis, quien se ha convertido en un poderoso corredor con los Browns de Cleveland, mientras los Broncos están necesitados de hombre de calidad para su ataque.
McDaniels se enfrentó con el mariscal de campo Jay Cutler, que al final lo enviaron a los Bears de Chicago, donde está triunfando, y los Broncos se quedaron sin Matt Cassel, que era el que él deseaba.
Tampoco se llevó bien con el prestigioso coordinador defensivo Mike Nolan después de una temporada y cambió el sistema patentado del legendario Mike Shanahan de ataque terrestre de zonas por un esquema tradicional de poder.
El ataque terrestre de Denver se ha convertido en uno de los peores de la NFL en lo que va de temporada y McDaniels ya no era querido por nadie en Denver, ni dentro ni fuera del equipo por lo que su condición de nuevo parado no ha extrañado, sino todo lo contrario se ve como una consecuencia lógica a su gestión.
