Houston (EE.UU.), 14 dic (EFE).- La decimocuarta semana de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) tuvo un final especial con dos partidos en lugar del tradicional que siempre se disputa y el final para una marca histórica que estaba en poder del mariscal de campo Brett Favre.
Nada menos que 19 años consecutivos sin haberse perdido ni un sólo partido (297) como titular dentro de la NFL.
Precisamente la ausencia en el campo de Favre fue lo que permitió que los Giants de Nueva York se aprovechan para ganar por 21-3 a los Vikings de Minnesota, en el partido aplazado del pasado domingo después que el techo de fibra de vidrio del Metrodome se rajase con el peso de la nieve.
Los directivos de la NFL decidieron elegir el Ford Field de Detroit (Michigan) para disputar el partido y los Giantes consiguieron un para de carreras largas de los titulares Brandon Jacobs y Ahmad Bradshaw para ganar fácil a los Vikings, que jugaron sin Favre.
El veterano mariscal de campo, de 41 años, vio terminarse su racha de partidos consecutivos en temporada regular jugados en la NFL en 297, debido a que su hombro derecho lesionado y su mano entumecida no se recuperaron a tiempo, a pesar que tuvo un día más de descanso para hacerlo.
"No hay nada que lamentar, simplemente luche al máximo para estar en condiciones físicas de poder jugar, no lo conseguí, eso es todo", declaró Favre. "Ha sido una gran carrera, pero ahora tal vez no pueda volver a jugar si mi mano no se recupera".
Con la ausencia de Favre, que está teniendo un final poco afortunado dentro y fuera de la competición de una brillante carrera, obligó a los Vikings a sacar al mariscal de campo Tarvaris Jackson, que no pudo superar la presión que le hizo la defensa de los Giants.
Jacson fue derribado en cuatro veces durante el partido y en el tercer periodo tuvo que ser retirado unos minutos para poder recuperarse de un golpe.
A pesar la odisea que les tocó pasar con los viajes cancelados por la nieve y estancia en ciudades que no tenían previsto, los Giants (9-4) lograron un triunfo fácil, que les permite seguir con aspiraciones a estar en la fase final de la NFL.
Los Giants vuelven a compartir el liderato de la División Este de la Conferencia Nacional (NFC) con los Eagles de Filadelfia, que el domingo habían ganado a los Cowboys de Dallas.
La nota negativa para los Giants fue la lesión de Bradshaw que tuvo que abandonar el partido en el cuarto período después de lastimarse la muñeca.
Mientras que el mariscal de campo de los Giants, Eli Manning, completó 22 de 37 pases para 187 yardas con un envío de anotación y le interceptaron dos ovoides.
Su hermano, Peyton Manning, mariscal estelar con los Colts de Indianápolis es ahora con 205 el que tiene la racha más larga de partidos consecutivos disputados en la NFL.
"Cuando hablé con él dijo sentirse frustrado por la manera como Brett (Favre) había cortado su racha histórica y única", declaró Eli Manning.
Mientras, los Giants piensan en estar en la fase final, los Vikings con marca de 5-8 y la posibilidad que Favre ya no vuelva a jugar más esta temporada están ya eliminados de toda posibilidad de jugar los "playoffs", otro gran frustración para el equipo.
La misma que volvieron a sufrir los aficionados de los Texans de Houston que vieron como su equipo por quinto partido en lo que va de temporada lo pierde en los últimos segundos o en el tiempo extra.
Esta vez los verdugos fueron los Ravens de Baltimore que se impusieron por 34-28 en el tiempo extra después que el defensa Josh Wilson interceptó un pase del mariscal de campo Matt Schaub y lo regresó 12 yardas para la anotación decisiva.
Los Ravens (9-4) se mantuvieron así un juego abajo de Steelers de Pittsburgh en la División Norte de la Conferencia Americana (AFC) a pesar de desperdiciar una ventaja de 28-7 en la segunda mitad.
Schaub lanzó un pase de cinco yardas para touchdown a Andre Johnson y realizó una conversión de dos puntos con Jacoby Jones cuando restaban 21 segundos en el tiempo regular para forzar el tiempo extra.
Los Ravens perdieron ventajas en los cuartos períodos de cada una de sus cuatro derrotas y tuvo que realizar una patada despeje después de su única serie ofensiva en el tiempo adicional.
Los Texans iniciaron el avance desde su yarda 12, y Schaub estaba tratando de conectar con Jones en segunda oportunidad cuando Wilson robó el ovoide y corrió hacia la zona de anotación.
Houston (5-8) ha perdido seis de sus últimos siete encuentros y ya no tiene ninguna posibilidad de estar en la fase final, siendo como los Vikings otra de las frustraciones dentro de la competición de la NFL.