LAS VEGAS.- Manny Pacquiao (54-4-2, 38 Kos) tuvo menos problemas de los esperados, pero al final, fue Tim Bradley (29-0, 12 Kos) quien ganó por una decisión dividida, el título Welter de la OMB.
El filipino hizo mejor las cosas, pero como alguna vez le sucedió ante el mexicano Juan Manuel Márquez, ahora pagó los platos rotos y vio cómo su invicto de más de siete años, caía a manos de unos rufianes.
Bradley se llevó dos de las tres tarjetas, 115-113, por una más de Manny, 115-113, para provocar una de las peores decisiones en la historia del boxeo. Pacquiao, quien vino a despejar dudas de sus problemas extraboxeo, no fue superado ante los ojos del mundo, pero no antes los ojos de miles en la arena y millones en el mundo.
El filipino impuso su mano izquierda en todo momento para limitar a un Timothy Bradley que nunca se halló con el estilo de su rival, y de paso, dio respuestas a las dudas que había creado el propio Pacman antes del pleito.
A través de 12 rounds, el filipino no tuvo problemas para derrocar a un Bradley que comenzó enjundioso pero terminó cediendo ante la velocidad del tagalo, quien esta vez sufrió una decisión terrible.
Pacquiao aseguró que él había ganado la pelea. La gente le respondió al filipino, quien hace siete meses se vio favorecido en su pleito ante Juan Manuel Márquez, y que hoy, sufrió una de esas cosas que hacen dudar de las decisiones boxísticas más que nunca.
En el respaldo, el sinaloense Jorge Travieso Arce aprovechó un grave error del boricua Jesús Rojas para terminar la pelea con un No Contest en el segundo round, luego de haberlo mandado en el primero a la lona tras un buen gancho de izquierda. Rojas golpeó al mexicano abajo del cinturón, y cuando el de Los Mochis se dolía, le conectó un gancho entre la oreja y la nuca, que derribó a Jorge, quien ya no se levantó a pelear.
Arce Armenta, de 32 años, ofreció revancha inmediata, dijo que estaba dominando al rival, quien aseguró que Arce había sido un cobarde, pues no quiso combatir. Al final, los dos salieron como entraron, Jorge con marca de 60-6-2 y 46 nocauts, mientras que Jesús lo hizo con
18-1-1 y 13 nocauts.
Quien dio la sorpresa fue el veterano Randall Bailey (43-7, 37 Kos), de 37 años, al noquear a Mike Jones (26-1, 19 Kos), luego de mandarlo a la lona en el round 10 y 11, obligando al réferi a detener el combate, por el título Welter de la FIB que el segundo ganaba de calle.
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