CHULA VISTA.- La noche del viernes se vivió una espectacular cartelera de box amateur en el centro deportivo González Sports Academy de Chula Vista.
Fueron cinco peleas las que hicieron vibrar al público que se dio cita para ver el talento local en la academia del beisbolista de las Medias Rojas de Boston, Adrián González y su familia.
Sin duda la pelea más prometedora de la noche fue entre Joshua Marks y Óscar Godoy.
Marks estaba atrapado en la esquina, recibía golpe tras golpe, parecía que el apodado "Superman" estaba apunto de ser noqueado por su adversario.
Eso fue hasta que el habilidoso pugilista encontró una forma de escapar y revirar los golpes ahora hacia Óscar Godoy.
Marks utilizó una tormenta de combinaciones entre ganchos y golpes al mentón para mandar a un herido Godoy hacia la misma esquina donde hace unos segundos se encontraba atrapado.
El referee Danny Sandoval tuvo que intervenir y detuvo la pelea antes de que Marks pudiera hacer más daño en el séptimo round. Marks logró la remontada en una batalla prevista para ocho rounds.
"Sabía que él nunca había llegado más lejos de cuatro rounds así que lo deje atacar", declaró el pugilista vencedor. "Sabía que podría con ello, que mis golpes al cuerpo lo detendrían, él ya estaba cansado", agregó.
El final de esa pelea fue del agrado de los presentes.
Tras el duelo Marks-Godoy vino otra de las más anticipadas de la noche.
Emmanuel Robles y Adrián Vargas salieron con un empate mayoritario del González Sports Academy.
Los jueces otorgaron un 39-37, 38-38, 38-38.
"Yo pensé que la pelea estaba más cerrada y que había ganado al menores tres de los cuatro rounds", declaró Robles, residente de Imperial Beach y derivado del gimnasio de box Old School de El Cajón. "Me siento robado en ese sentido".
Ambos boxeadores continúan invictos y posiblemente se vuelvan a encontrar en otro punto de sus carreras.
"Es una rivalidad local, así que estoy seguro que lo haremos de nuevo", dijo Robles. "Pero no será hasta que vayamos en búsqueda de un título de California o algo".
Por su parte, Vargas dijo que quiere la revancha más temprano que tarde.
Al cuestionarle qué habría hecho diferente ante Robles, Vargas comentó que no hubiera puesto tanta atención a una herida que tenía en medio de su frente.
"Eso fue lo que me echó a perder las cosas", mencionó.
No fue ninguna sorpresa que estos peleadores salieron al ring con la intención de castigar uno al otro y en gran parte de la pelea, Vargas ocasionó buen daño en los primeros rounds. El pugilista que sufrió una cortadura arriba de su ojo derecho a consecuencia de un golpe en la cabeza, lo hizo de nuevo en la segunda entrada.
El boxeador logró dos poderosos golpes de derecha a la cara, dejando sin aliento a Robles.
Al menos eso fue lo que pareció.
Robles respondió en el tercer round con una ponderosa combinación, recuperándose del daño recibido en el principio del duelo. El boxeador pudo responder a pesar del buen inicio de Vargas.
"Tenía mucho contra mi, traté de ganar un round y el público gritaba ´Adrián, Adrián´, eso es muy difícil de llevar", declaró al término de la pelea.
Esta era la segunda vez que los boxeadores locales se veían las caras. Vargas derrotó a Robles en 2008 cuando ambos eran adolescentes en búsqueda de una carrera profesional.
"Esta pelea fue más cerrada que la anterior", dijo Robles. "Fui capaz de darle más batalla".
La cartelera de box de la noche del viernes fue la primera en la academia deportiva para la promotora Jorge Marrón y Bobby D. Además, fue el primer evento deportivo en el centro fundado por el ex jugador de Padres, Adrián González y su familia.
La intención era mostrar talento local además de peleas del agrado de los aficionados al box.
Pablo Armenta, otro consentido del público no tuvo mucha pelea ante su adversario.
El boxeador detuvo a Omar Sánchez en un minuto y 25 segundos al segundo round utilizando un poderoso gancho derecho hacia el rostro de su contrincante, lo que derivó en que el referee detuviera la pelea.
En otro duelo, Raymundo Chacón de Northridge venció a Pablo Copul originario de Mérida a través de la decisión unánime. Los tres jueces calificaron la pelea 40-36 a favor de Chacón, quién utilizó su velocidad y habilidad para derrotar a su adversario quién se llevó una cortada encima de su ojo izquierdo.
Donde no hubo sangre fue en la pelea entre Gabriel Medina de Hemet y Luis Sánchez de Fairfield, pero hubo demasiado poder para complacer a los aficionados.
Medina venció a Sánchez por decisión mayoritaria en su debut profesional. El pugilista utilizó una serie de ganchos y golpes al mentón en cada round para detener a Sánchez.
Adrián Vargas y Emmanuel Robles en la pelea llevada a cabo en Eastlake. Paúl Gallegos
Ivan.orozco@sandiegored.com